SALARIO
En
las distintas actividades que se llevan a cabo en una economía se obtiene
siempre, por esa actividad, un retorno, una remuneración económica.
La economía clásica divide estos retornos en tres grupos, dependiendo
de quiénes los reciben: los capitalistas, o dueños del capital,
quienes obtienen beneficios; los trabajadores que aportan mano de obra, quienes
reciben un salario; y los dueños o propietarios de tierras, casas u otros
bienes inmuebles (bienes que no se pueden mover de su lugar), quienes reciben
rentas.
El
trabajo es la utilización, por parte de una persona, de talentos y habilidades
propias, ya sean físicas o mentales, para llevar a cabo una actividad.
Cuando esa actividad es una actividad productiva, la utilización de talentos
y habilidades genera un retorno económico que se denomina salario. El salario
seria, entonces, el precio pagado por la realización de un trabajo. El
salario puede variar dependiendo del lugar donde se trabaja, la región,
el país, la ocupación, etc.
El
pago por la realización de un trabajo se puede dar de distintas formas
(completamente en dinero, en dinero y en especie, etc.). Un pago de salario en
especie es, por ejemplo, cuando una empresa da, como parte del salario, la posibilidad
de utilizar instalaciones de la empresa destinadas a vivienda o paga la educación
de los hijos de los trabajadores o da una comida diaria u ofrece al empleado otros
tipos de bienes y servicios a muy bajos costos. Las legislaciones de los países
establecen el monto máximo de especie que se puede dar como parte del salario
(por ejemplo, un máximo del 30%, 40% o 50% del salario).
Dentro
del salario total que recibe un trabajador se incluyen ciertos beneficios extras.
Por ejemplo: las primas, las bonificaciones, las cesantías, los pagos al
sistema de seguridad social que les garantiza salud, pensiones de jubilación,
recreación, etc. Al tener estos pagos en cuenta, podemos diferenciar dos
tipos de salario: el salario básico y el salario integral. Un salario básico
es aquel que determina cuánto se ha de pagar por día, hora, mes,
año, etc., a un trabajador. A éste salario hay que sumarle los demás
beneficios anteriormente mencionados (cesantías, primas, etc.). Al tener
ya todo adicionado, al salario total se denomina salario integral. En la legislación
colombiana existe una figura llamada |salario integral, que es un salario que
se puede pagar completamente en dinero, incluyendo los pagos por horas extras
y dominicales y toda la prestación social. Este salario, mensualmente,
no debe ser menor a diez salarios mínimos más tres salarios mínimos
por todos los beneficios (extras, primas, etc.); es decir, el salario integral
debe ser, al menos, un salario equivalente a trece salarios mínimos legales
vigentes.
Desde
otro punto de vista, se pueden distinguir dos tipos de salarios: el salario real
y el salario nominal. El salario nominal es la cantidad de dinero que un trabajador
recibe por su trabajo por hora, día, mes, etc. El salario real, por otra
parte, es el poder de compra de esa cantidad de dinero; es decir,
indica qué cantidad de bienes y servicios se pueden adquirir con ese dinero
(con el salario nominal).
El
tema de los salarios reales y los nominales es de gran importancia. Generalmente,
los bienes y servicios que se encuentran en una economía pueden subir o
bajar de precios. Para que un salario nominal pueda mantener su poder de compra,
si aumenta el valor de los bienes, éste debe aumentar en el mismo porcentaje
que aumentan los bienes y servicios. Si el salario de un trabajador aumenta en
un 10% con respecto al año anterior, pero los bienes y servicios en la
economía lo hacen en un 13%, el salario perdió poder de compra,
por lo tanto, en términos reales, el salario es menor que el del año
anterior, aunque nominalmente sea mayor.
Teniendo
en cuenta que el salario es un precio pagado por el trabajo, éste está
determinado por la oferta y demanda de trabajo que exista en una economía.
Sin embargo, existe un límite inferior que imponen los gobiernos de los
países a la cantidad de salario que se le debe pagar a un trabajador que
se ocupa en una jornada laboral completa de ocho horas (para el caso de Colombia).
Este límite se considera el límite de subsistencia; es decir, el
mínimo necesario para mantener con vida a una persona y cubrir sus necesidades
más básicas. Este límite se conoce como el salario mínimo.
Bibliografía
consultada
- McCONNELL,
Campbell R. y BRUE, Stanley L., |Economía, McGraw-Hill, 1997.
- SAMUELSON,
Paul A. y NORDHAUS, Willliam D., |Economía, McGraw-Hill, México,
1986.